Este proyecto conquista su nombre a través de la fuerza bordeante de la naturaleza y su follaje. La fluidez de su movimiento sigue la curva natural de los árboles, dándole principalmente tres gestos armónicos.

El telón de fondo es el que inspiró las diagonales en elevación -a modo de ramas queriendo alcanzar el tope con una doble altura- aprovechando la parte más densa del follaje en espacios comunes. El techo habitable permite recorrer la curva arbórea, lo que se expresa en fuertes líneas horizontales, sostenida por sutiles diagonales.

La casa se limpia hacia al poniente; el biombo natural entregado una vez más por los árboles la protege bioclimáticamente.

El oriente aparece semi-protegido por el giro arquitectónico que conceden los ángulos dados estructuralmente. De manera natural las estaciones se entregan y otorgan espacios únicos. Al caer las hojas de los árboles, la fachada trasera de vidrio permite la entrada de la esquiva luz de sol invernal.

Branches house está ubicada a una hora y media de Santiago, específicamente en las afueras de Melipilla. El rápido acceso desde la capital, lo convierte en un excelente lugar para una segunda vivienda.

El proyecto se pensó y fue requerido por un matrimonio joven, con una pequeña hija, los cuales privilegian los fines de semanas en las afueras de Santiago junto a familiares. De ahí que los espacios de recreación están fuertemente valorados.